Hoy me invade la tristeza,
sólo al pensar que te has ido
miro hacia el horizonte.
En este día sombrío me aferro
a mis pensamientos,
quiero creer que es un sueño
y que sólo estás dormido.
Los días se han detenido,
los minutos son eternos,
las horas interminables.
Yo te espero amor mío
que despiertes de este sueño,
si es verdad que estás dormido.
Me duele la realidad
y me cuesta asumirlo.
Me dijeron que era fácil,
que el tiempo todo lo cura.
Pero no resulta fácil
perder a quien se ha querido,
todo me recuerda a ti.
Las campanas de la iglesia
me recuerdan nuestro amor
y me pregunto si algún día
terminará mi dolor.
No quiero soñar despierta
porque sería un error.
Todos nacemos con suerte
y la mía, amor mío
fue llegar a conocerte
y la peor, el perderte.
Hoy me invade la tristeza
y siento que estoy perdida,
vago entre tinieblas
y no encuentro la salida.
Es tan fuerte mi dolor
que me pregunto si algún día cesará,
puesto que hoy me duele lo mismo
o más que al principio.
En noches de luna llena
sólo encuentro oscuridad,
sigo buscando respuestas
y no las puedo encontrar.
Todo está triste y sombrío,
el sol no brilla en verano
porque se marchó mi amor.
Hoy sigo llorando en silencio
asomada a mi ventana,
maldiciendo al destino
que de mí te alejaba.
Allá en el horizonte vislumbro
una silueta que me recuerda a ti.
Empiezo a caminar con un solo objetivo,
el de poderte alcanzar.
Asomada a mi ventana
Tan sólo quiero llorar
porque sé que los luceros
mis lágrimas secarán.
Ellos han sido testigo del amor
que los dos nos hemos tenido,
el cual no ha terminado
cuando es amor sincero.
Carmen Moreno Segura